El aprendizaje de palabras extranjeras por frecuencia es una estrategia eficaz que emula la adquisición natural del lenguaje y se ajusta al Principio de Pareto, que sugiere que el aprendizaje de un pequeño porcentaje de palabras de alta frecuencia permite comprender la inmensa mayoría de las conversaciones cotidianas. Este enfoque se centra en las palabras funcionales -los componentes esenciales del lenguaje-, lo que facilita la construcción rápida de frases básicas y la expresión de ideas centrales.
Al concentrarse en las palabras de uso más frecuente, los alumnos pueden distribuir su tiempo de estudio de forma más estratégica, abordando segmentos manejables de la lengua que aportan beneficios comunicativos inmediatos. Este método no sólo hace más accesible el proceso de aprendizaje de idiomas, sino que también ofrece perspectivas culturales, ya que las palabras frecuentes suelen reflejar la vida cotidiana y las prioridades de los hablantes nativos.